Los juguetes podrán comunicarse con aparatos electrónicos a través de tecnologías inalámbricas como WiFi o Bluetooth, y podrían potencialmente tocar música o poner una película que un niño, o un adulto, les pidan.

El juguete fue descrito como capaz de escuchar a alguien, girar la cabeza para hacer "contacto visual", escuchar lo que se dice y responder con frases pregrabadas.